¿Conoces las esponjas faciales de Konjac?
Afortunadamente, los productos naturales para cuidar nuestro cuerpo y rostro están de moda. Y esto no solo nos beneficia a nosotros, también al planeta. Al elegirlos estamos siendo mucho más respetuosos con el mismo. Es lo que ocurre con la esponja facial de Konjac. 100% natural, cuida y mima nuestra piel y beneficia al planeta. Queremos explicar qué beneficios aporta a la piel, así que lo contamos en el siguiente post.
¿Qué son las esponjas de Konjac? ¿Qué beneficios aportan?
Las esponjas de Konjac están elaborada a partir de un tubérculo que se cultiva en Asia: el Konjac. Al ser 100 % natural es ideal para todas aquellas personas que quieren limpiar y exfoliar su piel sin sufrir alergias u otras reacciones. Es perfecta, incluso, para cuidar las pieles más sensibles y las de los más pequeños de la casa.
Asimismo hay que decir que es apta para todo tipo de pieles, tanto grasas como secas, sensibles, maduras… Podemos utilizar la esponja blanca o alguna que lleve un ingrediente específico para cada tipo de piel.
Por otro lado, estimula la circulación sanguínea y elimina todas las células muertas gracias a su suave poder exfoliante. Si queremos devolverle el resplandor a nuestra piel pero la tenemos excesivamente sensible y los productos tipo peeling no nos van bien, podemos elegir esta esponja. Además es excelente como calmante después de una depilación, por ejemplo.
Asimismo, por su condición natural es 100 % biodegradable. Con ello le estaremos haciendo un enorme favor al planeta, saturado de tantos plásticos y sintéticos. Es, sin duda, un producto totalmente respetuoso con la naturaleza.
¿Cuántos tipos de esponjas de Konjac hay?
La clásica es la blanca, una esponja que se adapta a todos los tipos de piel. Pero si queremos algo más específico podemos optar por otras que contengan algún ingrediente beneficioso para nuestra piel.
Entre ellas puedes encontrar:
– Esponja de Konjac de licopeno. Para reparar las quemaduras producidas por el exceso de sol. Una esponja ideal como fondo de tocador para el verano.
– Esponja de Konjac de té verde. Para dar suavidad y firmeza a la piel y protegerla del sol. Es perfecta cuando vivimos en un lugar donde el sol es abundante todo el año.
– Esponja de Konjac de lavanda. Para aliviar, calmar y regenerar la piel. Es ideal para cualquier época del año.
¿Cómo se utiliza la esponja Konjac?
No tenemos más que humedecerla con un poco de agua tibia hasta que se ablande y pasarla por la piel. Luego la dejamos secar y la volvemos a mojar cuando la vayamos a utilizar de nuevo. Como es un producto tan suave podemos utilizarlo todos los días. Si queremos, podemos añadirle algún jabón para el rostro, aunque solo con la esponja nos aseguramos una buena limpieza del rostro.
Esta esponja suele durar entre dos y tres meses. Al final de su uso, notaremos que poco a poco se va rasgando hasta que termine por romperse. Es el momento de que la sustituyamos por otra.
¿En qué momento del día podemos utilizarla?
Podemos usarla a cualquier hora del día. Por la mañana, nada más levantarnos, nos ayudará a despertar la piel y a lucirla radiante. Y por la noche, nos ayuda a liberar todas las impurezas que ha acumulado tras el día y a calmarla. Es idónea antes de aplicar la crema de noche. También podemos emplearla antes de acudir a un acontecimiento especial para lucir piel radiante sin necesidad de utilizar tratamientos caros y con la tranquilidad de que no tendremos problemas de rojeces o alergias.
Si queremos limpiar la piel con un producto natural y respetuoso con el medioambiente, la esponja facial konjac es inmejorable. ¿Quién quiere probar otra?
