Piel atópica, ¿qué es y de dónde vienen sus problemas?
La piel atópica es uno de los problemas cutáneos que provoca más preguntas entre nuestros clientes. No es de extrañar que muchas personas alteren su calidad de vida al padecer piel atópica ya que, en ocasiones, es complicado sobrellevar las consecuencias y entender cuál es la verdadera razón por la cual se padecen las distintas alteraciones derivadas.
A continuación, mostramos información al detalle relacionado con la piel atópica.
Pieles atópicas, ¿qué son?
Antes de iniciarnos con este tema, hay que conocer más del término “atopía”. Esta proviene de una combinación de dos factores clave: un sistema inmunitario extremadamente reactivo y una piel muy seca.
Hablamos de la piel propensa a los factores atópicos cuando el sistema inmunitario responde en exceso al estar en contacto con alérgenos u otras situaciones ambientales. Se dice que esta situación puede ser hereditaria, es decir, que otras personas de nuestra familia pueden padecer lo mismo. Así, existe una probabilidad del 40 al 50 % de que un niño también desarrolle dermatitis atópica cuando uno de los padres es atópico, y una probabilidad del 50 al 80 % cuando ambos padres son atópicos.
¿Cómo cuidar la piel? Consejos
Debemos saber que la piel crea una capa delgada de agua y aceites (lípidos) en su superficie para protegerse, conocida como película hidrolipídica. Además, produce la filagrina, una molécula que sirve como un «cemento» para garantizar su permeabilidad. Cuando el nivel de lípidos o filagrina no es suficiente, la piel deja que la humedad se reduzca, perdiendo permeabilidad y no actuando eficazmente como una barrera contra ciertos factores dañinos. Así, los alérgenos pueden entrar fácilmente en el sistema. De este modo, lo mejor es llevar a cabo los siguientes consejos:
– Seleccionaremos una crema hidratante adecuada y la aplicaremos al menos dos veces al día. Las cremas o ungüentos más espesos, como la vaselina, funcionan mejor que las lociones más delgadas.
– Nos ducharemos una vez al día con agua tibia y con un jabón artesanal. Luego, secaremos suavemente la piel con una toalla. Mientras la piel todavía está húmeda o incluso mojada, aplicaremos la crema hidratante de inmediato.
– Si tenemos costras en la piel, podemos sumergirnos en un baño de agua tibia durante 5 a 10 minutos. Luego, secaremos suavemente la piel y aplicaremos la crema hidratante de inmediato.
Otros consejos que debemos seguir:
– Utilizar productos de cosmética natural. Los productos que puedes encontrar en la tienda online de Idaro son completamente naturales y artesanos. Disponemos de productos adaptados a todo tipo de pieles como el jabón de argán artesano o el jabón de zanahoria y lavanda.
– Cortar las etiquetas en la ropa. Es importante comprar nuestra ropa sin etiquetas o cortaremos aquellas que nos molesten.
– Lavar la ropa nueva antes de usarla. Los tintes y acabados de tela en ropa nueva pueden producirnos reacciones.
– Evitaremos hacer ejercicio con exceso de calor en verano. Debemos buscar formas de mantenernos activos en el interior de casa o hacer ejercicio al aire libre cuando no hace tanto calor (como a primera hora de la mañana).
Es en estas situaciones cuando hay que cuidar al máximo la piel seca con productos naturales, cosmética certificada que utilice ingredientes que realmente van a hidratar nuestra piel, la van a mimar y, por supuesto, que sea no comedogénica. Los productos químicos que utilizan los productos convencionales para cuidar la piel pueden causar enrojecimiento, irritación y episodios de dermatitis atópica. Incluso, muchas personas son alérgicas a los productos químicos que se encuentran comúnmente en productos elaborados convencionalmente.
En conclusión, la reacción excesiva del sistema inmune combinada con una piel seca dará como resultado a una piel atópica, sobre todo si hay alérgenos o en situaciones ambientales particulares. Entre dos brotes, se dan unos períodos de descanso que pueden extenderse en el tiempo llevando a cabo los consejos anteriormente dichos. La cosmética natural también es fundamental.